miércoles, abril 12, 2006

Así...



Sin querer que las imágenes cubran mis cabellos,
sin pedirle a Dios que bendiga mis manos.
Atravieso la persiana y martillo la puerta

Toc – Toc

El silencio me hace pensar que nadie abrirá.
Vuelvo a intentarlo

Toc – Toc

Sólo un perro a lo lejos contesta la señal.
Yo sabía que nadie abriría,
sabía que me quedaría afuera.

Me termino de convencer y golpeo la puerta por tercera vez.

Me miento, me digo que quizá sólo no han escuchado,
que están durmiendo, o en el baño y por eso no han podido abrir.

¡Ya¡

No hay nadie, me convenzo.
Bueno no tenía por que haber alguien.
No avise que venía.
Al menos así podría tener alguna oportunidad que me abrieran la puerta.

Camino lentamente, ahora con la puerta en mi espalda y mis emociones ya de frente.
Enciendo un cigarrillo.
Sabe muy mal.
Subo el cierre de mi chaqueta.
Comienza a llover.
Pienso en cuando volver.

No hay comentarios.: